Este artículo se dirige a las maravillosas mamás de 70 años que nos transmiten día día su amor incondicional. A todas esas heroínas que se dejan cada día la piel por los suyos pues continúan pendiente de nosotros. A las que como la mía, ¡¡están ahí siempre que las necesitas!!

Un Corazón rojo con una luz brillante encima para las maravillosas mamás de 70 años

Gracias por querernos incondicionalmente. Por protegernos ante la adversidad. Por cuidarnos cuando estamos enfermos. Por transmitirnos tanto y tanto amor. Por hacer sentir a sus hijos que cada uno es único, independientemente de si eres el mayor, el menor o el del medio. Por esa sonrisa a mitad de la noche cuando estamos enfermos. Por el calor de sus abrazos. Por arroparnos con sus dulces palabras. Por el gran amor que sentimos en cada uno de sus deliciosos besos…

Por levantarse temprano, aunque pasasen mala noche, para preparar el desayuno y llevarnos al colegio. Por recogernos del colegio y llevarnos a las actividades extra escolares, a aprender «eso que nos apasiona». Por dejarnos volar y ser independientes. Por enseñarnos valores y educarnos ante la vida. Por potenciar nuestras virtudes. Por decirnos a la cara cuales son nuestros defectos. Por enseñarnos a «ser mejor persona».

Gracias a todas esas mamas, pero muy en especial, a esas maravillosas mamás de 70 y 80 años, como la mía, que siguen preocupándose y cuidando de nosotros con pasión y entrega… Día a día, ¡¡independientemente de la edad que tengamos sus hijos!! Les regalo lo que hago yo también con tanto amor, mi pasión por la danza.

Ojalá el mundo estuviese dirigido por estas increíbles mujeres de férreos principios, porque entonces sentiríamos la paz que transmite esta coreografía y viviríamos en » Imagine» el idílico mundo de John Lemon.

Te quiero con toda mi alma mamá y aunque la que escriba sea yo, no me cabe la menor duda de que ¡¡firmo por los tres!!

En mi nombre y en el de todo el alumnado del Centro de Danza Sandra Santa Cruz: ¡¡¡Feliz día de la madres!!!