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Por todos es conocido que la ciudad de New York es por excelencia el referente donde están los mejores espectáculos del mundo. Broadway hace soñar cada día a millones de personas con la magia que emana de sus escenarios. Multitud de magestuosos teatros con un gran despliege de medios técnicos que no tienen nada que envidiar a una película de Steven Spilberg, abren sus puertas seis días a la semana. Se encienden las luces y comienza el espectáculo…
Pero quizás quién más ha jugado con la luz como simple elemento visual, hoy en día es más que necesario para su puesta en escena, ha sido el mundo del Rock. No podemos imaginarnos un concierto, donde las luces simplemente acompañan reforzando lo que sucede en el escenario y no sean en sí mismas un espectáculo.
Así como la robótica ha ido acaparando cada vez más su sitio en los teatros y relegando a un segundo término a los focos convencionales, ahora es la tecnología I+D quién intenta imponerse. El camino no muy lejano, hacia donde se dirige el mundo de la iluminación escénica es una mezcla de iluminación y video.
¡Lástimas que en Las Palmas todavía nos falte mucho por recorrer, tendremos que seguir viajando!