Aunque la noticia salió a la luz en junio del año pasado sobre la polémica de la leche, algunas madres del alumnado del Centro de Danza Sandra Santa Cruz desconocían muchos de estos datos. Como les prometí en junio, he recavado información suficiente para publicar este post.

El 26 de marzo de 2012 el Juzgado desestimó la demanda que la patronal lechera interpuso por el estudio de calidad de la leche. Para los consumidores es una buena noticia que la Justicia avale la labor informativa de la OCU y considere que el estudio no supone ningún descrédito para el sector lácteo.

La leche, alimento nutricional básico e indiscutible hasta nuestro tiempo, quedó en la cuerda floja debido a los análisis realizados por la OCU en junio de 2011. ¿Son todas las leches iguales?, ¿alimentan por igual?, ¿estamos seguros de saber lo que bebemos?. Les aseguro que yo me llevé una desagradable sorpresa.

Al decantarnos por una marca específica basándonos en elecciones como precio,  fama, tamaño para guardarla en casa o su sabor especial, olvidamos las razones  realmente importantes para nuestra salud: «el valor nutritivo, la composición y la manipulación de la misma para su correcto almacenaje antes del consumo».

El desarrollo tecnológico que permite realizar experimentos impensables en el pasado, la masificación de la población que demanda mayor cantidad de comida y el interés económico de algunos empresarios sin escrúpulos, hacen que una de las fuentes principales de alimento de la humanidad tanto para niños como para adultos pierda credibilidad.

Cuarenta y siete marcas de leches españolas han sido sometidas a  estudio. La información que han proporcionado dichos análisis contiene bastantes sorpresas: hay 10 de las leches cuya compra desaconsejan vivamente. En los últimos 20 años casi se ha conseguido duplicar la producción de leche, pero a costa de una menor concentración de nutrientes.

Comparativa de marcas de leche tras la polémica de la leche